Este tipo de animales presentan mucho miedo. Cuando uno consigue tranquilizar a un animal de granja, se está tranquilizando también a sí mismo. Acariciar un conejo, una gallina o un cerdo puede resultar placentero, ya que no se suelen dejar acariciar más que si tienen confianza en uno. Y eso es muy bueno para personas tímidas, retraídas, con temores, introvertidas y que buscan expansión.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjC9zieZ-hA3stlHtgx50hU5QId68zJtCqqDOSuAEBoymmisAgVSSeoSO2ArozPnY_ODZaz83hf2FDUa1uSKOrLmKjcSjOP3_lYVcJEC07khFFgawk9cMWUAZVXJ-jqkfiPvPA9lUjZP7m3/s200/perro%252Cgato.jpg)
![]() |
http://animalesterapeutas.blogspot.com/ |
No hay comentarios:
Publicar un comentario